De la Gestapo a la KGB, por Jorge Colmán

Capital Federal (Agencia Paco Urondo) Del manual del buen espía y de las argumentaciones cuando te atrapan.

Parece que la oposición no cambia (sea de izquierda o derecha) porque otra vez aparecen espías en el escenario político. Que han existido y existirán espías en la política, las finanzas, los ejércitos; ni dudarlo. Según se pueden observar en las cámaras de seguridad, el señor Roberto Larrosa se movía por el Ministerio de Economía como un pez en el agua, pero eso no sería extraño si él no fuera un asesor del Diputado Claudio Lozano (hombre de “Pino” Solanas).

Según su jefe “fue una represalia oficial por la denuncia en el canje de la deuda”, ahora nada dice de que, como y porque este buen señor se paseaba abriendo oficinas (por lo que se puede observar tenía incluso llaves de las mismas) a esa hora de la noche. El diario Clarín hace una patética historia de cómo fue detenido el asesor de Claudio Lozano “…la policía –que entró rompiendo una puerta que estaba abierta-, apuntándolo, le dijo: primero, ‘este operativo se hace en nombre de la Presidenta de la Nación'; segundo, ‘usted es periodista de Clarín, qué está haciendo acá'; tercero, 'usted trabaja con el diputado Lozano'…” Seguramente “Pino” hubiera escrito un mejor guión para la escena, pero salió esta berretada sin autor.

Interesante es ver las herramientas de trabajo del asesor Larrosa: Lupas, linternas…¿Sera que el diputado lo negrea demasiado con el sueldo y tiene alguna “changuita” de inspector de sócalos, búsqueda de plagas, electricidad o informática en el Ministerio? Es interesante también ver las argumentaciones de la oposición a la hora de ser atrapados. Como los chicos en la escuela dicen: ¡Yo no fui!, ¡Yo no estaba haciendo nada!, ¡Pasaba por ahí solamente! Igualito que Mauricio Macri dice que es un complot del gobierno, y hasta la escena bizarra que describe el monopolio de la comunicación Clarín lo repite ¡La culpa la tiene Cristina!. También dicen (Macri y Lozano) que son “buenos muchachos”, que el “Fino” Palacios era buen policía, que el “Grueso” Larrosa andaba haciendo trámites pero no se dio cuenta de la hora y creyó que el Ministerio de Economía era un “autoservicio informativo”.

Como vemos existen muchas coincidencias entre la derecha y la izquierda opositora, no solo votan juntos a favor de los intereses económicos más concentrados, sino que también espían y mienten con los mismos argumentos. Unos y otros se alimentan y retroalimentan, todos hacen declaraciones al mismo monopolio mediático y este “comunica” (ordena) lo que el Partido Opositor necesita para posicionarse. ¿Se imaginan la próxima película que Pino tiene en mente? ¿La guionista será Herrera de Noble? ¿ARTEAR producirá el film? Yo les paso un título: “Lozano y Macri, dos tipos audaces”. (Agencia Paco Urondo)