"Para los medios somos una especie de grupo de choque", entrevista a Larroque (secretario de La Cámpora)

Capital Federal (Agencia Paco Urondo) Recién llegado de Mar del Plata, donde la presidenta Cristina Fernández rebautizó el aeropuerto local con el nombre de Astor Piazzolla, el secretario general de La Cámpora, Andrés Larroque, accedió a una entrevista con Política y Medios. Durante la charla, Larroque habló sobre la relación de la agrupación con los medios, la nueva etapa tras el lock out agrario y la nueva ley de radiodifusión, uno de los proyectos fundamentales del Gobierno.

¿Por qué los grandes medios de comunicación los muestran como una agrupación violenta?
El manejo de los medios es muy superficial, sólo tienen dos lugares para describir a la juventud. Primero buscaron trivializar el espacio, con el foco en Máximo Kirchner. Cuando hicimos las primeras conferencias de prensa, con documentos claros, los medios cambiaron la lógica y pasamos a ser una preocupación, un problema. Lo lamentable es que nunca se detuvieron a analizar ninguno de los párrafos que escribimos. Tampoco plantearon la discusión en función de nuestros conceptos políticos. Pasamos de ser un grupo de amigos de Máximo a una especia de grupo de choque, que censura a los medios.

¿Cómo se hace para revertir esa imagen negativa?
Mao Tse Tung hablaba de la táctica del mosquito. Tenemos que ser muchos mosquitos. Tenemos que tratar de multiplicar los medios alternativos y comunitarios. Tenemos que estar cien por ciento dispuestos a discutir.

Ley de Radiodifusión

¿En ese sentido se perfila la nueva ley de radiodifusión?
Si, la idea es democratizar los medios de comunicación, que haya un porcentaje de medios privados, otros comunitarios y otros estatales para evitar la concentración. Pero no sólo se tiene que dar esta discusión en el congreso y ver cuántas manos se levantan, también debe existir la discusión de la sociedad. En ese sentido irá nuestro trabajo, de forma inteligente, con charlas y discusiones. Porque no creo que nadie quiera seguir con una ley que se redactó durante la dictadura, o que no se democraticen los medios.

¿Creés que el proyecto de la nueva ley se va a tratar a corto plazo?
El momento se va a ir construyendo. Le ley es fundamental, porque si se aprueba irá rompiendo el cerco que los medios nos pusieron. Y a partir de eso podremos discutir directamente otros temas con la sociedad. La distribución del ingreso sólo es posible en la medida en que podamos tener canales para explicarla a la sociedad.

En el portal La Política Online, dijeron que desde La Cámpora quieren crear Comités de Defensa como en Cuba. ¿Qué hay de verdad en eso?
Ese día hablábamos de lograr un nivel de interacción mayor, de recomponer la idea de la unidad básica, que es lo que el peronismo tuvo como eje fundamental y que en los noventa se perdió y se transformó en un lugar de punteros, vacío de política. Se ve que alguno que anduvo dando vueltas lo comparó rápidamente con el modelo cubano, al cual respetamos, pero también tenemos en claro que estamos en Argentina y los modelos que tomamos son los que nuestra historia transmite. Uno de lo ejes centrales de La Cámpora es recomponer esa idea de militancia territorial, de las bases, y relacionarlas con el Estado. Esa es la manera en que el peronismo construyó históricamente. En América Latina, los modelos exitosos para el campo popular fueron siempre de esa manera.

Conflicto con el campo

Tras el lockout agrario se perdió una parte de la base social que se había conseguido en las elecciones. ¿Cómo se está trabajando desde La Cámpora para recomponer esa base?

Lamentablemente, siempre resta cuando te mostrás frontal y honesto. Quizás lo políticamente correcto hubiese sido cuidar el capital que teníamos hace un año, sentarnos arriba de las fichas para jugar a la gobernabilidad y pasar a ser un gobierno más en la lista de los que traicionaron el mandato de construir una Nación. Pero el camino que se eligió fue otro. El conflicto también sirvió para depurar. Ciertos actores que pensábamos que estaban por convicción los vimos saltar del barco. Son oportunistas de la política. El kirchnerismo partió a toda la sociedad. Para algunos eso es malo, para nosotros es bueno, porque enfoca la discusión a la raíz, al punto medular de qué país queremos. Igualmente la verdadera discusión se debe dar en el pueblo, en las organizaciones, en los movimientos. Ahora se abrió una etapa de construcción de poder. Tengamos en cuenta que los personajes que motorizaron la oposición a las retenciones, hace 5 años no podían salir a la calle. En función de que se recomponía el país, ellos también se fueron recomponiendo. Cuando el kirchnerismo corrió el eje de discusión, se dejó de hablar de esos 20 mafiosos y desde la sombra se reactivaron.

Actualidad de La Cámpora

¿Cómo describirías el momento actual de la agrupación?

Estamos en la etapa organizativa, de normalización, ya que en todo el país hay compañeros que se reivindican del movimiento. Se reconoce mucha más gente de la que podemos dar cuenta, porque nuestras declaraciones y documentos crearon simpatía en todo el país. En eso, los medios jugaron un papel importante, porque a pesar de las críticas, muchos compañeros simpatizaron con nuestros planteos. Generó un efecto que no esperábamos y creó mucha adhesión.

¿De qué forma se construyen esos nuevos espacios?

Nuestra lógica no es llegar a cada lugar en un paracaídas y armar La Cámpora en la universidad, en los sindicatos… Hay que considerar a los que estuvieron 5, 10 o 20 años trabajando en un esquema determinado. Hay que ser respetuoso de lo que está organizado. No queremos que La Cámpora sea una remera que los jóvenes se ponen porque está de moda. Queremos instalar ejes de discusión y, sobre todo, ofrecer un espacio de debate para los compañeros distanciados del proyecto nacional.(Agencia Paco Urondo)