domingo, 9 de mayo de 2010

El valor de la Unasur por el Embajador Oscar Laborde

Capital Federal (Agencia Paco Urondo) Los medios de comunicación, en las horas previas a la reunión de la UNASUR , dedicaron su tiempo a especular sobre los posibles vetos y abstenciones a la candidatura de Néstor Kirchner a la Secretaría General de la misma. Nada de esto ocurrió y la estructura regional, no sólo salió fortalecida desde lo institucional, sino que el cargo que ahora ya ocupa el ex – presidente argentino significa, no sólo una jerarquización manifiesta, sino una potenciación de las grandes líneas de acción, ratificadas en su Declaración Final.

Resulta valiosa, en ese marco, la expresa mención a las experiencias obtenidas por años de trabajo desde la Cumbre Andina y el Mercosur; y desde allí se consolida una agenda en donde los temas sociales tienen una impronta muy marcada. Este es uno de los datos políticos más importantes de la reunión celebrada en Buenos Aires.

Aparecen, entonces, las instrucciones al Consejo Suramericano sobre el Problema Mundial de las Drogas para el inicio de sus actividades y la elaboración inmediata de su Plan de Acción; y la cuestión migratoria (en consonancia con el anuncio de Cristina Kirchner de la reglamentación de la ley respectiva en nuestro país) con dos elementos centrales: el rechazo a la ley del Estado de Arizona en Estados Unidos y el interés prioritario por temas de desarrollo humano, y en particular el migratorio, expresado en el artículo 23 del documento.

A ello debe agregársele el reconocimiento al carácter concreto y propositivo de las conclusiones de la Conferencia Mundial de los Pueblos sobre el Cambio Climático celebrada recientemente en Cochabamba –Bolivia-, y el explicitar de que se tomaba nota de la iniciativa de Evo Morales por presentar ante la ONU un proyecto de Resolución respecto al reconocimiento del Derecho al Agua como un Derecho Humano.

Tampoco pasaron inadvertidas la decisión de dar un tratamiento prioritario a lo relativo a la certificación de la calidad de la educación universitaria entre los países del bloque, los avances del Consejo de Salud Suramericano o al peso que la reconstrucción de Haití tuvo en las consideraciones de los presidentes, entre ellas la instrucción al Secretario General para que constituya de inmediato en la ciudad de Puerto Príncipe la Secretaria Técnica UNASUR-HAITI y se avance en la ayuda al país hermano.

Estas temáticas no expresan sólo preocupaciones sino que recogen, también, el esfuerzo incansable de numerosas organizaciones sociales de toda América Latina: No es una construcción de arriba hacia abajo; es exactamente lo contrario; manifiesta claramente otra concepción política de la integración regional y de las características y metas que ella se plantea.

Sin duda alguna que las cuestiones de defensa, financiera y energética completan el núcleo duro de la agenda.

En la primera de las nombradas se ha consolidado el clima de confianza entre las naciones y se ha reforzado la idea de la utilidad de la UNASUR y su Consejo de Defensa para la solución pacífica de controversias.

Por otro lado se reconoció la labor en el campo energético, ya sea en el Plan de Acción como en la puesta de plazos y prioridades para la elaboración de un Tratado Energético Suramericano; y se hizo una valoración altamente positiva de los avances en la integración financiera regional.

Lo más significativo es que, partiendo de la decisión política de los presidentes, se fortalece el criterio de estimular espacios de mayor autonomía – a la hora de las resoluciones – frente a los poderes centrales, trazando líneas estratégicas y no sólo expresando intencionalidades y deseos.

De allí la valoración que debe hacerse de la tarea que Néstor Kirchner acaba de asumir.(Agencia Paco Urondo)

No hay comentarios:

Publicar un comentario