Bogotá, Colombia (Agencia Paco Urondo, publicado en Telesur) El Gobierno colombiano no ha emitido hasta ahora ninguna declaración para confirmar o desmentir esa reunión. Además la comisión fáctica de diálogo que rechazó la propuesta de Arias al insistir en que el jefe de Estado legítimo "no puede volver a la Presidencia", no asistirá más a los encuentros.
El presidente de Colombia, Álvaro Uribe, expresó su "simpatía" por el Gobierno de facto de Honduras, según declaró este miércoles el canciller de facto del país centroamericano, Carlos López, a la emisora radial La FM, luego que ambos se reunieran el pasado lunes en Bogotá.
López le confirmó al medio de ese encuentro y reveló que Uribe expresó "simpatía" por el Gobierno promotor del golpe de Estado, presidido por Roberto Micheletti.
Más adelante, precisó que "el tema principal" que se trató en el diálogo con Uribe "fue la situación en Honduras, la situación interna que estamos viviendo" a raíz del golpe militar que perpetraron contra el presidente legítimo y constitucional de Honduras, Manuel Zelaya, el pasado 28 de junio.
El canciller fáctico hondureño argumentó que su visita a Colombia se debió presuntamente porque, a su juicio, ambas naciones son "víctimas de agresores externos comunes, como (el presidente de Venezuela), Hugo Chávez", a quien consideró "una amenaza para las naciones, para la independencia de cada una de ellas", según el ministro golpista declaró a La FM.
Además, el líder de la Revolución Bolivariana es responsabilizado de la crisis que se vive en Honduras por el promotor principal del golpe de Estado y quien se designó como "presidente" de facto.
Según López, el encuentro con Uribe se produjo el pasado lunes por la noche en Bogotá y en él participaron otros siete delegados del Gobierno de facto.
El Gobierno colombiano no ha emitido hasta ahora ninguna declaración para confirmar o desmentir esa reunión.
Delegación fáctica pospone viaje a Costa Rica
La comisión del Gobierno de facto, presidido por Roberto Micheletti postergó el viaje que tenía previsto para este miércoles a Costa Rica para proseguir con la negociación que lidera el presidente de ese país, Óscar Arias, en torno a la crisis desatada por el golpe de Estado propinado el pasado 28 de junio por las autoridades fácticas.
El canciller y jefe de la delegación de facto de Micheletti, Carlos López, y una de sus miembros, Vilma Morales, corroboraron este miércoles a la prensa la suspensión del viaje, aunque excusaron que no supone el abandono definitivo del proceso de negociación que no ha mostrado hasta los momentos una solución concreta.
López explicó que la comisión decidió no viajar ante la emisión, el lunes, de una declaración de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) de facto, que reiteró que el presidente legítimo y constitucional de Honduras, Manuel Zelaya, "fue destituido por un mandato judicial y no puede regresar a asumir la Presidencia de la República".
"Eso es una barrera", puntualizó López, quien informó de que el martes envió al presidente de Costa Rica, un "documento de trabajo que estaba subordinado a que hubiera consentimiento de parte de los tres poderes del Estado (fácticos)" hondureño en las decisiones.
Por su parte, otra integrante de la delegación del promotor del golpe Micheletti, insistió en que el retorno del presidente Zelaya "es el punto conflictivo" del proceso de mediación. Además, precisó que otros aspectos de la propuesta que Arias expuso el fin de semana -aceptada en su totalidad por Zelata y su delegación-, "depende de varios organismos del Estado".
La comisión fáctica rechazó la propuesta de Arias al insistir en que el jefe de Estado legítimo "no puede volver a la Presidencia", por lo que exigió más tiempo para hacer consultas sobre los otros puntos en el país centroamericano con el resto de las autoridades golpistas.
No obstante, la ex magistrada Morales garantizó que "la mediación sigue" y que la delegación de Micheletti "está dispuesta a viajar a Costa Rica para conocer un nuevo planteamiento" que, según versiones de prensa, el presidente costarricense tiene pautado exponer este miércoles.
El Gobierno de facto de Roberto Micheletti, la CSJ de facto y el Ministerio Público fáctico sostienen que Zelaya no sufrió un golpe de Estado sino que fue derrocado el 28 de junio por un mandato judicial por haber violado la Constitución al intentar celebrar, ese día, una consulta -no vinculante-.
Sin embargo, la Comunidad Internacional, la Organización de las Naciones Unidas (ONU), la Organización de Estados Americanos (OEA) y el mundo, reconoce y condena enérgicamente la acción militar violenta. Además, desconoce tanto al gobierno golpista como cualquier acción que éste tome, y se considera nula por su carácter ilegítimo.
El presidente de Colombia, Álvaro Uribe, se reunió con el Canciller de facto de Honduras. (Agencia Paco Urondo)
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