Capital Federal (Agencia Paco Urondo) El martes por la noche, la “mesa chica” del Partido Justicialista, rechazó en forma unánime la renuncia a la Presidencia de dicho partido que había presentado el Primer Caballero Néstor Kirchner luego de la derrota electoral del 28-J. A mi entender, esta fue una de las decisiones más acertadas de la conducción justicialista de los últimos años. Es el compañero Néstor Kirchner el único capaz para seguir adelante con la profundización de este modelo nacional y popular.
Es el ex presidente, que a partir del 25 de mayo de 2003 nos dio a los argentinos esperanza y trabajo. Es el Primer Caballero que junto a la compañera Presidenta Cristina Kirchner resisten con estoicismo y entereza la andanada de críticas y descalificaciones de aquellos sectores q nunca comprendieron el país ni lo comprenderán jamás. Estamos ante una oportunidad histórica por primera vez. Por primera vez, ellos necesitan más de nosotros, que nosotros de ellos. Seamos inteligentes. Dejemos de mirarnos al ombligo. Tratemos de vivir un bicentenario diferente al centenario que vivió este país.
En la Argentina del Centenario, nuestro país era el principal exportador de carne y trigo, exportaba todo. Sin embargo, los argentinos se morían de hambre. Y los obreros eran apaleados y fusilados. Hace casi 100 años, el país vivió sus primeros tiempos con estado de sitio. Y, como siempre, los que primero cayeron fueron los pobres. Después vinieron por los obreros. Por último, por la clase media. Por esa clase media que muchas veces, a partir de prejuicios culturales, termina actuando en contra de sus propios intereses. Los intereses de la clase media, son los intereses de los TRABAJADORES. Son los de los empresarios, comerciantes. Son de los que tienen sus intereses atados aquí y los que no pueden girar dólares al exterior. Dejemos de un lado los cantos de sirena.
Los argentinos tuvimos muchos cantos de sirena, y nos fue muy mal. Por eso, el respeto por la democracia, por la voluntad popular, por los poderes legal y constitucionalmente establecidos del Estado. Por una democracia del Pueblo y no de las corporaciones. Por una democracia en donde todos y cada unos de nosotros tengamos el derecho a disentir pero dentro del marco de las instituciones, de la ley y de la Constitución. Esa es la Argentina que tiene que ser ejemplo en el mundo. Y a todos los que siempre bregaron desde los distintos medios por esto, sería mucho más importante una visión equilibrada y equidistante. Porque este proceso, este modelo económico, que nos ha logrado reposicionarnos, a nosotros y a nuestra gente, necesita de todos, sin lugar a dudas. Pero en ese TODOS, cada uno tiene su lugar, el que le dio su gente y su representación.
Por todo esto, y sumado además al documento que dio a conocer hoy el partido peronista, es que hoy me siento más peronista que nunca. Me siento excelentemente representado por dirigentes que lograron plasmar en un documento su más profundo rechazo a la renuncia del compañero Néstor Kirchner. Donde pudieron contener su más enérgico sostén a la compañera Presidenta Cristina Kirchner. Donde pudieron argumentar que este es el único camino que nos llevará a una patria liberada, como soñaban muchos argentinos, que ya no están.
Donde pudieron apoyar la convocatoria de la CGT para una marcha a Plaza de Mayo el próximo 20 de noviembre para respaldar las instituciones. Donde pudieron utilizar, por primera vez y con orgullo, la palabra “revolución” al referirse a la asignación familiar por hijo. Por todas estas cosas, y en nombre de todos ellos, hoy puedo decir que el Partido Justicialista representa claramente el modelo nacional y popular; modelo que pregonaban el General Perón y la Inmortal Evita. Hoy pude entender, que el PJ disidente es sólo eso. “Disidente”: que está en contra, que disiente con algo. Pues el PJ disidente está en contra del PJ, por ende en contra del peronismo.
Hoy estoy orgulloso de ser peronista, y orgulloso de que alguien pueda seguir adelante las consignas de aquellos que soñaron la grandeza de la Patria: Mariano Moreno, San Martín, Belgrano, Rosas, Irigoyen, Perón y Evita, y las Madres y Abuelas. Hoy estoy orgulloso de pertenecer a un movimiento que desea fervientemente la unidad Latinoamericana, donde por primera vez en mucho tiempo, los Presidentes se parecen a su pueblo. Hoy estoy orgulloso de pertenecer a un movimiento encabezado por el Primer Caballero Néstor Kirchner y por la Presidenta Cristina Kirchner.
El autor es militante de la Juventud Peronista. (Agencia Paco Urondo)
Un presidente que vive peleado con todos
Hace 21 horas
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