Un 17 de noviembre de 1972, por Leticia Thomassen

Capital Federal (Agencia Paco Urondo) El Peronismo es una revolución sin lugar a dudas y solo basta con indagar un poco más en la historia, y no quedarnos con lo que algunos cretinos intentan mostrar. Para empezar debemos remitirnos a los conceptos de Revolución y Dictadura.

Revolución: Es el cambio o transformación radical y profunda respecto del pasado inmediato. Se puede producir en varios aspectos simultáneos o no, económico, social político, etc. Los cambios revolucionarios traen consecuencias trascendentales.

Dictadura: Es una forma de gobierno concentrada en 1º o varias personas. Quedan suspendidas la división de poderes legislativo, ejecutivo y judicial, como tales; los líderes no se renuevan periódicamente y ni tampoco por sufragio universal, libre, directo y secreto, Quedan suspendidas las garantías constitucionales, entre otras cuestiones tales como que sus opositores son perseguidos, ultrajados, torturados, asesinados, etc.



Partiendo de esta base indaguemos un poco en nuestra historia, el peronismo surge posteriormente al golpe de estado de 1943, que fue encabezado por Ramírez, apoyado por un grupo de jóvenes del Ejército: El G.O.U. Grupo de Oficiales Unidos que se oponía a la participación argentina en la segunda guerra mundial del lado de los Aliados y preconizaba una neutralidad a ultranza. Los fundadores eran amigos que habían decidido encontrarse regularmente, porque compartían las mismas inquietudes. Perón fue uno de los fundadores del GOU, formaban parte del estado mayor revolucionario antiyrigoyenista El programa del GOU se convirtió finalmente en el programa de la revolución del 43.

La estructura económica del país había cambiado profundamente durante la década del 30, debido a la gran depresión que provocó una reducción importante del comercio internacional. Esto afectó a la economía argentina, basada en la agroexportación, que hubo de reconvertirse mediante el control del mercado de carnes y granos y una acelerada industrialización basada en la sustitución de importaciones de los productos manufacturados. Este proceso fue acompañado de un importante flujo migratorio interno desde las zonas rurales del interior hacia la periferia de las grandes ciudades (fundamentalmente Buenos Aires, Rosario y Córdoba). Estas nuevas masas populares, empleadas en las nuevas industrias y sin antecedentes de sindicalización, son las que constituirán la base del movimiento peronista.

Se puede fechar el nacimiento del movimiento peronista el 17 de octubre de 1945 cuando Las movilizaciones populares organizadas por la CGT lograron la liberación de Juan Domingo Perón, quien había sido encarcelado por sectores militares opuestos a su influencia creciente en el gobierno. Desde este momento, Perón se convirtió en el candidato oficial del régimen para las elecciones presidenciales de 1946. Perón se presentó como candidato del Partido Laborista, llevando como vicepresidente a Hortensio Quijano, un radical de la disidente Junta Renovadora. Tras asumir la presidencia, Perón comienza rápidamente a consolidar su poder. En lo interno, disuelve al Partido Laborista y lo integra en el nuevo Partido Peronista (llamado brevemente Partido Único de la Revolución), del que Perón es el primer afiliado (29 de enero de 1947), y que contará con tres ramas: la sindical (la CGT, única confederación sindical permitida), la política y, a partir de 1952, al permitirse el voto a la mujer, la rama femenina. Más tarde se considerará a la Juventud Peronista como cuarta rama del Movimiento

El gobierno peronista fue duro con la oposición política y sindical, y esto le valió de sustento para quienes veían y ven con desagrado, el título de dictadura, deberíamos partir de la base que los movimientos son llevados a cabo y concretados por un grupo de gente, el movimiento peronista esta considerado uno de los más importantes del mundo, y tenía mucha gente y a Perón! (que tenía miles de defectos porque era un hombre mortal, como Sarmiento, San Martín, Belgrano, ustedes también se creyeron que era Díos, porque así parecía el 17 de octubre, y como les pesa a algunos todavía!) y con respecto a este último no deberíamos ser obsecuentes tuvo conductas extremas, que rozan con las dictatoriales, pero recordemos que enmarcadas en la gloriosa democracia, en donde existía división de poderes, teníamos deberes y DERECHOS, es más, gracias a este movimiento y a este gobierno la gente más humilde y relegada por cualquier otra agrupación política comienza a organizarse y a hacer valer sus derechos, y la mujer empieza a ser considerada con igualdad y a votar, majestuosa obra si las hay. Entonces en este marco no podemos hablar bajo ningún punto de vista de dictadura, si de revolución, cambiamos, política, económica, y socialmente, y su obra trascendió en el tiempo, pilares de una revolución, que hubo errores seguro!, cuando uno hace seguro que se puede equivocar, quien no hace nada, difícil que se equivoque.

Ya Perón en pleno ejercicio de su presidencia, las razones del descontento anidaban en el creciente enfrentamiento de Perón con la Iglesia Católica debido a la sanción de una ley de divorcio, el permiso que habilitaba prostíbulos y la decisión de abandonar el sostén del culto por parte del Estado. En verdad, la crisis económica había precipitado también la puja distributiva: el sector más rico y propietario, del campo o la industria, no estaba dispuesto a tolerar una distribución del ingreso semejante: el 50 por ciento del PBI pasaba a los trabajadores. Estos datos para que vayamos entendiendo quienes dicen que el Peronismo es una dictadura.

El peronismo ha acogido a numerosas tendencias ideológicas que han entrado permanentemente en conflicto. Desde su aparición en la escena política nacional, el peronismo fue definido por Perón como un Movimiento Nacional, que englobaba un sector social denominado “clase trabajadora”. Este apelativo, que inicialmente fue un eufemismo utilizado por el General para distinguir su concepción “nacional y popular” de los criterios marxistas “proletarios”, se convirtió en un breve lapso en una definición doctrinaria que afirmaba para el peronismo la oposición a la lucha de clases. En ese marco, el Movimiento Peronista comprendía (idealmente) a todos aquellos que podían coincidir con los conceptos de Justicia Social, Soberanía Política e Independencia Económica.

Perón organizo en principio un movimiento encabezado solo por su persona, y luego el pueblo, pero esto en la práctica no era duradero en el tiempo, evidenciaba múltiples falencias, es por eso que comienzan a surgir los comunicadores de Perón, Evita por excelencia, Cooke, entre otros. La inmediata aceptación y popularidad con la que contó la abanderada de los humildes hizo crecer el descontento en varios sectores sobretodo militar, pero es esta sin lugar a dudas para los peronistas, los descamisados, el emblema del Peronismo, sin ella, ni el justicialismo ni Perón hubieran llegado a ser lo que fueron y son. Vale para entender al peronismo adentrarse en su doctrina, propongo que vale la pena compartir las 20 verdades peronistas:
1. La verdadera democracia es aquella donde el gobierno hace lo que el pueblo quiere y defiende un solo interés: el del pueblo.
2. El Peronismo es esencialmente popular. Todo círculo político es antipopular, y por lo tanto, no es peronista.
3. El peronista trabaja para el Movimiento. El que en su nombre sirve a un círculo, o a un caudillo, lo es sólo de nombre.
4. No existe para el Peronismo más que una sola clase de hombres: los que trabajan.
5. En la Nueva Argentina el trabajo es un derecho que crea la dignidad del hombre y es un deber, porque es justo que cada uno produzca por lo menos lo que consume.
6. Para un Peronista de bien, no puede haber nada mejor que otro Peronista.
Que luego se dijo también que para un argentino no hay nada mejor que otro argentino.
7. Ningún Peronista debe sentirse más de lo que es, ni menos de lo que debe ser. Cuando un Peronista comienza a sentirse más de lo que es, empieza a convertirse en oligarca.
8. En la acción política la escala de valores de todo peronista es la siguiente: primero la Patria, después el Movimiento, y luego los Hombres.
9. La política no es para nosotros un fin, sino solo el medio para el bien de la Patria, que es la felicidad de sus hijos y la grandeza nacional.
10. Los dos brazos del Peronismo son la Justicia Social y la Ayuda Social. Con ellos damos al Pueblo un abrazo de justicia y de amor.
11. El Peronismo anhela la unidad nacional y no la lucha. Desea héroes pero no mártires.
12. En la Nueva Argentina los únicos privilegiados son los niños.
13. Un gobierno sin doctrina es un cuerpo sin alma. Por eso el Peronismo tiene su propia doctrina política, económica y social: el Justicialismo.
14. El Justicialismo es una nueva filosofía de vida simple, práctica, popular, profundamente cristiana y profundamente humanista.
15. Como doctrina política, el Justicialismo realiza el equilibrio del derecho del individuo con la comunidad.
16. Como doctrina económica, el Justicialismo realiza la economía social, poniendo el capital al servicio de la economía y ésta al servicio del bienestar social.
17. Como doctrina social, el Justicialismo realiza la Justicia Social, que da a cada persona su derecho en función social.
18. Queremos una Argentina socialmente justa, económicamente libre, y políticamente soberana.
19. Constituimos un gobierno centralizado, un Estado organizado y un pueblo libre.
20. En esta tierra lo mejor que tenemos es el Pueblo.

Perón decía “la organización vence al tiempo”, hizo junto a su esposa y su pueblo, de su política un movimiento, una doctrina, una forma de vivir y de considerar al otro por lo que es y no por lo que tiene, no inútilmente sigue siendo el único partido político tradicional en pié, con las distintas sectorizaciones que quieran alegar, así es el Peronismo capaz de albergar diferentes interpretaciones, diferentes maneras de ver que es lo mejor para el país, siempre se puede mejorar, en esos estamos, estamos en camino, seguimos de pié y más unidos que los que muchos creen.

El pobre, el trabajador, el más humilde a ciertos sectores le horroriza, le da asco, al Peronismo no!, por el contrario queremos que tengan las mismas posibilidades de crecer y vivir dignamente, queremos que puedan estudiar, -dicen que se manifiestan como incivilizados y si! No tuvieron las mismas oportunidades en la vida que otros, por eso lucha ahora el peronismo, con la camada de jóvenes que creemos que existe una Argentina distinta, y que el Justicialismo puesto en práctica es ideal, Justicia Social, Soberanía Política e Independencia Económica.

El Peronismo fue una revolución, pero aún hoy sigue siendo tan fuerte este movimiento que los otros siguen trabajando silenciosamente para desprestigiarlo y para confundir a los más jóvenes, es la única manera que tiene de combatirlo porque aún con Perón y Evita muertos, sigue siendo el movimiento más grande del país, que sigue en vigencia, porque no están muertos siguen vivos en cada uno de los jóvenes peronistas que lo vamos a continuar y a engrandecer.

Viva Perón!
Viva Evita!
Viva la Juventud Peronista!
Feliz día compañeros!!!
(Agencia Paco Urondo)