San Martín, Buenos Aires (Agencia Paco Urondo, publicado en Prensa de Frente) El lunes 22 se conoció un fallo judicial perjudicial para los 23 trabajadores despedidos arbitrariamente en diciembre pasado en Bosch que rechazó una medida cautelar para que fueran reincorporados, luego de la represión ocurrida el jueves pasado en la General Paz, en San Martín, en donde protestaban los trabajadores de la autopartista. Mientras tanto, otro conflicto con despidos arbitrarios, en el Frigorífico Rioplatense, en donde echaron a ochenta empleados, aguarda el fin de la conciliación obligatoria, que será el próximo viernes. En ambos lugares de trabajo se analizan en asamblea cómo seguir y posibles medidas de fuerza.
El conflicto en la autopartista Bosch viene desde diciembre del año pasado, cuando el conjunto de los trabajadores fueron despedidos de la empresa y se enteraron al ir al cajero y encontrar depositada su indemnización. Desde entonces, tomaron la planta, llevaron adelante numerosas medidas de fuerza y, en reuniones con directivos de la empresa, el Ministerio de Trabajo definió la reincorporación de los despedidos.
Sin embargo, la empresa R.B.I -Rio Bravo Industrial- (que compró la metalúrgica y está intimidante ligada a los despidos, ya que en el acuerdo de traspaso de la planta de Bosch y Rio Bravo se marcaba la condición de bajar los costos), reincorporó solamente a 74 trabajadores y hoy hay 23 que continúan peleando por la recuperación de sus fuentes de trabajo.
Uno de ellos, Victor Velarde, integrante de la Comisión Interna de la planta, denunció el accionar de la empresa y aseguró que los trabajadores reincorporados y despedidos continúan organizándose para revertir la situación: “Hay una maniobra fraudulenta entre los directivos de Bosch y de RBI para rebajar los salarios, aumentar los niveles de producción y echar compañeros. Hoy en día, los compañeros que están trabajando cobran alrededor de 900 pesos menos: no pagan los tickets, no pagan el adicional ni el presentismo y dijeron que no lo iban a pagar. Están trabajando ocho horas de lunes a sábado, más que antes y viven un clima de apriete constante, metieron vigilancia privada, los amenazan. Lo cierto es que los compañeros se siguen reuniendo con nosotros, los que quedamos afuera y van a dar pelea”.
Es así que los cesanteados llevaron el reclamo a la Justicia, logrando una medida cautelar del Juzgado Civil y Comercial N° 2 de San Martín, a cargo del Juez Alberto Maresca, que ordenaba la reincorporación de los 23 trabajadores despedidos. Sin embargo, la empresa apeló y la Camara de Apelaciones revocó la medida cautelar.
Por este motivo los trabajadores realizaron el jueves pasado un corte en Avenida General Paz y San Martín que fue reprimido por la policía y en donde un diputado finalizó con un profundo corte en la cabeza por un bastonazo y varios manifestantes fueron heridos de bala de goma. Allí, los trabajadores exigieron el cumplimiento de los acuerdos firmados por la empresa y la ejecución de la medida cautelar.
Hoy, los trabajadores repudiaron la decisión judicial, que desconoce los acuerdos a los que s comprometió la empresa en el Ministerio de Trabajo y el posterior y reiterado incumplimiento. “Vanmos a seguir dando la pelea, ya que tenemos todos los argumentos a favor. En enero estuvieron los inspectores del gobierno registrando el incumplimiento de la empresa que no nos permitió ingresar a la planta cuando nos correspondía. Es una empresa que hace lo que quiere y elude los acuerdos definidos en el Ministerio de Trabajo. Pero nosotros vamos a seguir luchando, estamos haciendo asambleas esta semana con el conjunto de los compañeros que siguen adentro de la planta, que los quieren presionar todo el tiempo para rebajar sus condiciones laborales y meter miedo. No lo van a lograr”, aseguró Velarde.
Extienden la conciliación en el Frigorífico Rioplatense
Mientras tanto, en uno de los frigoríficos más importantes de América Latina,
se extendió la conciliación hasta el viernes, día en que los delegados de Rioplatense se reunirán con directivos de la empresa en el Ministerio de Trabajo.
Una trabajadora del frigorífico, militante de la agrupación Fogoneros denunció el clima que se vive cotidianamente: “Hay un apriete de la empresa constante. Los directivos le pagan lo mismo a los despedidos reincorporados por la conciliación obligatoria que asisten al trabajo que a los que no asisten. Nos cambian de sector, los horarios, nos preguntan por qué hablamos con los delegados. Intentan desgastarnos todo el tiempo”, explicó.
Sin embargo, los trabajadores continúan realizando asambleas y el próximo jueves organizaran qué respuesta dar frente a la audiencia que mantendrán el viernes. El objetivo será que todos los despidos mantengan sus puestos de trabajo. (Agencia Paco Urondo)
Liberales dudando de los números de Milei
Hace 14 horas
No hay comentarios:
Publicar un comentario